"De la chaqueta a los barcos"

Desde que el Presidente (del Uruguay) José Mujica se colocó una chaqueta del ejército bolivariano de Venezuela, ya nada nos sorprende.

      Claro, el hombre quizá tenía frío (pese a que se encontraba en un país tropical).    

     Pero hay más. El equívoco mensaje sobre la violencia doméstica (dada desde una perspectiva machista), circunscripta a una mera repartija de volantes, no hace más que arengar a una imagen que ha empezado un notorio proceso de desgaste; o, la falta de ejercicio de la autoridad en asuntos nacionales que atraviesan momentos críticos: seguridad, educación y salud, muestran un rumbo incierto para el país.

      En materia de política exterior, su talón de Alquiles lo conforma, obviamente el ausente MERCOSUR, donde predomina la armonía ideológica. Jamás se ha visto trabajar sobre la integración comercial en el bloque, y que ello, repercuta en beneficio de la producción y comercio nacionales.

      Hoy, el sistema político discute sí el gobierno se equivoca o no, en no permitir el ingreso de barcos británicos provenientes de las Islas Malvinas. Al respecto nos preguntamos: Uruguay ¿pretende ser complaciente o solidario con Argentina? Y ¿Cuándo nuestra hermana República nos ha tratado de igual forma? Cedimos territorio en la Isla Martín García y ahora cedemos en el ámbito de nuestras decisiones públicas. ¿Dónde está el beneficio para el país? ¿Recién ahora ingresan barcos desde Malvinas al Uruguay?

       Sinceramente, este tema de la Soberanía Nacional, socavada con notoriedad y persistencia, no le hace bien al país; venimos perdiendo conciencia nacional ya hace largo rato, por lo menos, desde que las decisiones del pueblo son enmendadas por un gobierno, a sugerencia de terceros ajenos a la República.